Hola a tod@s. Hoy os traemos, de nuevo, la opinión que
nos merece una novela. En este caso se trata de "1 plan para
amarte", de Irene de Westmister.
Como el tiempo es oro y para nosotras escasea tanto,
solo una de nosotras ha podido leerlo, así que aquí os dejamos nuestra
impresión sobre ella.
SINOPSIS
Londres, 1813
El nuevo Duque de Shelford es un hombre duro e implacable, que no conoce el significado de la palabra "clemencia". Siempre toma lo que desea, y lo que desea es poseer a esa joven de cascos ligeros que lo mira con una extraña mezcla de desfachatez, odio y vergüenza. La quiere debajo de su cuerpo, afiebrada de pasión y totalmente a su merced; pero sólo la quiere allí por un corto periodo de tiempo.
Eleanor aprendió de guerras y estrategia militar en las rodillas de su padre, por eso se cree valiente, se piensa un soldado, está dispuesta a asumir cualquier riesgo con tal de ejecutar el Plan que ha diseñado. Y el Plan, en este caso, tiene tres partes: desenmascarar a los franceses que trabajan en Londres como espías de Napoleón, buscarse un marido acaudalado que pueda sacar a su madre y medio-hermano de la ruina y vengarse del causante de todo sus males: el oscuro Duque de Shelford, que los echó a la calle cuando heredó su título sin importarle (o sin saber) que el medio-hermano de Eleanor era también su medio-hermano. Por añadidura, el duque tiene una reputación malévola, ya que entre otras cosas se afirma por lo bajo que asesinó a su mujer.
Entre fiestas, carruajes y vestidos demasiado escotados, el Plan que en un principio parecía fácil toma la maldita costumbre de enmarañarse. Eleanor pronto descubre que detrás de cada piedra hay un posible espía y que el Duque está interesado en ella… sólo para tomarla como amante. Ella corresponde a su pasión con odio tiznado de deseo y mientras los espías franceses la empujan hacia la cama del duque y las propuestas serias que recibe se desvanecen en el aire, la joven se siente cada vez más inclinada a aceptar la oferta de los brazos de Shelford, donde no quiere estar. ¿O sí quiere?
El nuevo Duque de Shelford es un hombre duro e implacable, que no conoce el significado de la palabra "clemencia". Siempre toma lo que desea, y lo que desea es poseer a esa joven de cascos ligeros que lo mira con una extraña mezcla de desfachatez, odio y vergüenza. La quiere debajo de su cuerpo, afiebrada de pasión y totalmente a su merced; pero sólo la quiere allí por un corto periodo de tiempo.
Eleanor aprendió de guerras y estrategia militar en las rodillas de su padre, por eso se cree valiente, se piensa un soldado, está dispuesta a asumir cualquier riesgo con tal de ejecutar el Plan que ha diseñado. Y el Plan, en este caso, tiene tres partes: desenmascarar a los franceses que trabajan en Londres como espías de Napoleón, buscarse un marido acaudalado que pueda sacar a su madre y medio-hermano de la ruina y vengarse del causante de todo sus males: el oscuro Duque de Shelford, que los echó a la calle cuando heredó su título sin importarle (o sin saber) que el medio-hermano de Eleanor era también su medio-hermano. Por añadidura, el duque tiene una reputación malévola, ya que entre otras cosas se afirma por lo bajo que asesinó a su mujer.
Entre fiestas, carruajes y vestidos demasiado escotados, el Plan que en un principio parecía fácil toma la maldita costumbre de enmarañarse. Eleanor pronto descubre que detrás de cada piedra hay un posible espía y que el Duque está interesado en ella… sólo para tomarla como amante. Ella corresponde a su pasión con odio tiznado de deseo y mientras los espías franceses la empujan hacia la cama del duque y las propuestas serias que recibe se desvanecen en el aire, la joven se siente cada vez más inclinada a aceptar la oferta de los brazos de Shelford, donde no quiere estar. ¿O sí quiere?
OPINIÓN PERSONAL
He de decir que
empecé el libro con ciertas reservas. Aunque me apetecía leerlo, los argumentos
con espías en la época de Napoleón (junto con las de piratas) no son de mi
preferencia. No obstante, ha valido la pena.
Cuando empecé a
leer, la primera parte del libro me produjo sentimientos encontrados, así que
quizás me resulte difícil decir qué opinión me merece. Para mi gusto, hay poco
diálogo, lo cual enlentece la trama. También he echado en falta escenas más
largas entre ambos protagonistas y no esos encuentros tan fugaces donde se
cruzan pocas palabras. Entiendo que pueda ser así porque es una historia corta,
pero yo hubiera preferido menos escenas y hacer de las que quedaban más
completas e intensas.
La segunda
parte, no obstante, mucho mejor. El ritmo es más alto, las intrigas se van
concretando y dan paso a la acción. Debo reconocer que en algunos momentos yo
misma deseaba gritarle al duque para que espabilara y se enterara de cómo
estaba la situación.
Respecto a los
protagonistas debo confesar que en un comienzo él no me cayó nada bien debido a
su soberbia. Además, estaba del lado de Eleanor y de su venganza, sin embargo
fui cambiando de opinión a medida que la trama avanzaba. En ese punto, él mismo
cae en un gran dilema, pues se da cuenta que la ama (creyéndola ser una espía
francesa) pero su razón (junto con el honor por su patria) le dice que debe
denunciarla.
Desde un
principio, ella es valiente y luchadora, haría lo que fuera por su familia. Por
ello se ve envuelta en una trama que llegará a sobrepasarla y cae en los brazos
de un hombre que creía despreciable.
Lo que no ha
terminado de gustarme es que a veces se repite en exceso la palabra “plan”.
En cambio, lo
que sí me ha gustado es la forma de escribir de Irene, su prosa y su
vocabulario. Tras leerlo he pensado: “bien hecho”.
En conclusión,
es un libro que se lee rápido, bien escrito y correctamente ambientado.
Nota: BUENO